miércoles, 2 de septiembre de 2009

I'll never go. (2)



Efectivamente el tiempo les separó, y fue ese mismo tiempo quien les volvió a juntar años después en el bar al que siempre solían ir juntos.

Ella estaba de visita en la ciudad.
Él se había tomado el día libre porque últimamente las cosas no iban muy bien.

Pasearon y charlaron un rato, y se dieron cuenta de que hablando no iban a saciar el hambre que el uno tenía del otro. Dejaron las palabras y pasaron a las ganas.
Las ganas de besarse, de sentirse, de morderse, de arañarse. Ningún deseo quedó insatisfecho. No esa noche.
Realizaron un amplio recorrido por los portales de la ciudad hasta que se dieron cuenta de que allí no podían hacerlo, asi que fueron a la casa de él.

Hicieron el amor con tantas ganas y gritaron con tanta fuerza sus nombres que los grabaron en las paredes de la habitación a ritmo de un orgasmo simultáneo.

Por la mañana, cuando se despertó a su lado, la observó mientras dormía y se dio cuenta de algo que le arrancó una sonrisa. Seguía allí. Tal y como ella prometió en su momento, no iba a irse...y no lo hizo.

5 comentarios:

  1. Soy yoo!!! :D El texto me recuerda al que escribí del bar. Y esto me encanta:


    Hicieron el amor con tantas ganas y gritaron con tanta fuerza sus nombres que los grabaron en las paredes de la habitación a ritmo de un orgasmo simultáneo.

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  2. Me encantó el texto ^^

    "Seguía allí. Tal y como ella prometió en su momento, no iba a irse...y no lo hizo"

    Tan perfecta esta parte.

    un beso ^^

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  3. me ha enganchado totalmente, tiene el toque picante que sugiere pero no es vulgar :)

    aqui un seguidor nuevo

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  4. precioso texto :)
    quisieron recuperar el tiempo perdido..

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  5. no sé cómo lo haces...me sorprendes, positivamente está claro (:
    tequiero!

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